Por: Yanetsy León González.
Foto: Poster del evento.
El Festival Internacional de Videoarte de Camagüey (FIVAC), obligado por la pandemia de la Covid-19 a cambiar la fecha y el esquema de programación, desarrollará su novena edición los días 8, 9 y 10 de noviembre en la sede del Circuito para la Exhibición y el Desarrollo de los Nuevos Medios (CEDINM).
“Vamos a presentar un total de 93 obras, de 102 artistas que están representando 26 países. Entre esos países, Rumanía, Suecia, Estados Unidos, Italia, El Salvador y Cuba”, precisó la curadora Teresa Bustillo.
En relación con ediciones anteriores, se produjo un récord de presentación de obras: “esto habla del placer, de la necesidad consustancial del ser humano de crear, independientemente de las circunstancias tan desfavorables que ha tenido el mundo en los dos últimos años”, añadió.
Aunque prescindieron del espacio de confrontación teórica, la coordinadora del proyecto La Próxima Resistencia explicó que el habitual segmento de muestras de festivales análogos se promoverá en otro momento.
FIVAC solo ocupará como sede El Circuito, a partir de las 6:00 p.m. del día 8, mientras que el 9 abrirá a las 10:00 a.m. en su galería Pixel, y también ofrecerá proyecciones en su amplia sala denominada Georges Méliès.
“Nos gusta hacer FIVAC como una fiesta, porque un festival es eso: es un momento para celebrar el trabajo de los artistas; pero pensar en hacer un festival como si no hubiera pasado nada nos parecía un poco cínico. Ahora hacer FIVAC lo veo como un regalo para la gente, una invitación a salir de casa a disfrutar de algo nuevo, interesante”, insistió la productora general Diana Rosa Pérez Legón.
La fecha inicial de la cita camagüeyana que preside el artista multimedial Jorge Luis Santana era en abril, pero la compleja situación epidemiológica de Camagüey hizo al comité organizador posponer para noviembre; sin embargo, la COVID-19 no ha desaparecido como se deseaba.
“Por su carácter autofinanciado, FIVAC tenía una cuota de inscripción. Este año no se va a cobrar nada. La entrada es libre. Queremos que sea un espacio de sosiego después de la pandemia”, enfatizó Pérez Legón.
Recientemente, el viernes 29 de octubre reabrió sus puertas el proyecto cultural El Circuito, solo con la opción de cine en 3D, y con el riguroso cumplimiento de protocolos sanitarios como el uso obligatorio de mascarilla, el distanciamiento físico y el lavado de manos con soluciones cloradas.
“Desde enero no trabajamos. El Circuito pudo mantenerse en pie gracias a la cuenta del Festival. El Circuito es el modelo de autogestión del Festival; de hecho, los fondos que teníamos en la cuenta del Festival fueron generados por nosotros mismos desde El Circuito”, concluyó la productora general.